La soberbia actuación del cancerbero carballés metió al equipo en el partido tras una mala primera parte Los colegiados pontevedreses Emilio Pallarés y Roberto Pérez fueron decisivos en la derrota del Calvo Xiria ante el líder Atlético Novás en Carballo: 24-25. La soberbia actuación del meta carballés Villa metió al equipo en un partido en el que estuvo perdido en la primera parte. Los hombres de Selín se pusieron por primera vez delante en el marcador a falta de nueve minutos con un gol de Escudero (18-17). El público local tardó demasiado en meterse en el partido con su aliento y presión a la pareja arbitral.

J. M. F. CARBALLO (Vía La Voz de Galicia)

Calvo Xiria (24, 12 + 12): Óscar (Villa); Jordi Escudero (6), Mario, Chof (2), Tachi (1), Martín (2), Ángel (4) -equipo inicial- Marcos (2), Fernando Vázquez (6, 4 de penalti), Ofi (1) y Tom. Raúl no llegó a jugar.

Atlético Novás (20, 10 + 10): Esteban (Diego Delafuente); Ramón Martínez (2), Jacobo Coello (3), Parente (4, 1 de penalti), Nicolai (7), Francisco Pombal (4), Beni (1) -equipo inicial- Germán (2), Pablo Martínez, Pousa.

Marcador cada cinco minutos: 0-2, 2-4, 5-7, 9-10, 11-1, 13-14 (1ª parte), 15-15, 18-18, 20-19, 21-22, 22-23 y 24-25.

Árbitros: Emilio Pallarés y Roberto Pérez (Gallegos). Determinantes. No midieron por el mismo rasero al conjunto carballés y al de O Rosal. Mostraron la tarjeta roja a Ángel (min 57), a Pablo Martínez (min 58) y a Marcos (59).

Incidencias: Doscientos aficionados acudieron al pabellón de la zona escolar de Carballo.

La primera parte fue mala por parte del Calvo Xiria. Faltó intensidad defensiva y la selección de tiros fue desacertada. En frente, el líder At. Novás defendió muy bien y aprovechó los lanzamientos del ruso Nicolai, de 2,01 metros de estatura, y el oficio del jugador Parente.

En la reanudación y con un Villa inconmensurable, los carballeses mejoraron defensivamente y estuvieron más metidos en el encuentro. La selección de tiro mejoró y pasaron a llevar el peso del choque.

En los minutos finales del encuentro, la pareja arbitral fue determinante y sus decisiones, siempre protestadas, dieron la victoria al Novás.