Calvo Xiria y Lalín dieron una lección de balonmano ante 500 aficionados: 23-29

El pabellón carballés acogió la mejor entrada de la liga en el partido de más calidad de los últimos años El Calvo Xiria y el Lalín exhibieron un balonmano de muchos quilates en el mejor encuentro que se ha visto en Carballo en los últimos años. La victoria de los visitantes se fraguó en cinco minutos de la segunda parte, en los que se pasó de un 22-23 al 23-29 final. El pabellón acogió la mejor entrada de la liga.

J. M. F. CARBALLO

Calvo Xiria (23, 9 + 14): Óscar (Villa); Petriceciv (8, 2 de penalti), Tom, Suso (3), Fernando (2), Raúl (1), Martín (2) -equipo inicial- Lojo (2), Ofi (5), Marcos. Alfonso no llegó a jugar ningún minuto.

Lalín (29, 13 + 16): Durán (Pablo); Diego Sieiro (8, 3 de penalti), Jorge Gulias (6), Jorge Escuredo (3), Toño (2), Granja (2), Abel González (7) -equipo inicial- Carlos Aller, Budi y Camilo (1).

Árbitros: Herández Giraldo y Treceño Díaz (Asturias). Estuvieron a un gran nivel.

Marcador cada cinco minutos: 1-3, 2-5, 5-8, 6-10, 7-11, 9-13 (1ª parte), 11-15, 15-16, 18-19, 20-21, 22-26 y 23-29.

Incidencias: Quinientos aficionados, entre los que se dejaron sentir muchos seguidores de la comarca del Deza.

El Lalín exhibió oficio y velocidad en la primera parte, en la que encontró a un Calvo Xiria que supo plantar cara, pero siempre con dos o tres tantos en contra en el marcador. Dos postes de Petricevic impidieron a los locales acercarse cuando el resultado era 6-10.

En la reanudación, el partido ofreció la belleza del balonmano, con dos equipos jugando al cien por ciento de sus posibilidades. Los empates se sudecieron a partir del primero (19-19), pero después de un parcial de 0-5, el Lalín logró romper el encuentro en el momento culminante del choque.

El cancerbero Durán estuvo inconmensurable en la primera parte, Diego Sieiro dio una exhibición en lanzamientos y Abel González fue el director del Lalín. En los locales, Petricevic volvió a ser el buque insignia, y todo el equipo estuvo brillante ante el mejor rival que ha visitado Carballo. La afición premió a ambos equipos con una larga ovación.